LA VIDA SE ME AMONTONA
Montones. Aparecen por doquier en cuanto me descuido.
Montones de libros por todas partes, montones de pelos en la bañera. Que asco. Montones de ropa en el dormitorio, montones de preguntas sin respuesta, montones de respuestas que no me gustan. Montones de tareas pendientes, montones de olvidos y olvidados.
Montones.
Montones.
Montones.
Y es que a veces la vida se me amontona.
Están por los rincones y van creciendo mientras pasan desapercibidos. Pero una noche, de camino a casa después de una semana de trabajo, escuchas una canción en la radio o lees una frase en algún lado, y entonces de repente los ves por todas partes: los libros, los pelos, la ropa, las preguntas, las respuestas, las tareas pendientes, los olvidos y los olvidados.
Montones de libros por todas partes, montones de pelos en la bañera. Que asco. Montones de ropa en el dormitorio, montones de preguntas sin respuesta, montones de respuestas que no me gustan. Montones de tareas pendientes, montones de olvidos y olvidados.
Montones.
Montones.
Montones.
Y es que a veces la vida se me amontona.
Están por los rincones y van creciendo mientras pasan desapercibidos. Pero una noche, de camino a casa después de una semana de trabajo, escuchas una canción en la radio o lees una frase en algún lado, y entonces de repente los ves por todas partes: los libros, los pelos, la ropa, las preguntas, las respuestas, las tareas pendientes, los olvidos y los olvidados.
Comentarios
MONTONES.
Un montón de montones de besos. Paula